Los animales también sienten y aman.   

 

En la naturaleza existen los animales humanos y los animales no humanos.   

 

La salvación no es propia de los seres humanos, los animales deben de ser salvos de la mano depredadora del hombre.  

Los seres humanos no pertenecemos al reino humano, sino que pertenecemos al reino animal.    

 

¿Que nos hace pensar que los animales no humanos no tienen el mismo derecho de ser protegidos de igual manera que como se protegen los derechos de los seres humanos?   

 

En los sistemas legales o las constituciones de algunos países, hay una distinción en la ley entre dos tipos de entidades: los animales que son personas y los animales que no son personas. Los primeros tienen derechos, y los segundos son meras cosas que se pueden poseer y que no tienen derechos. Los seres humanos no somos los únicos animales con derecho al reconocimiento y protección de sus derechos fundamentales.   

 

Al igual que con los derechos humanos, se deben de aplicar leyes de los derechos de los animales no humanos, pues no debe de existir diferencia alguna entre los derechos de los humanos y de los no humanos. Los seres humanos también somos animales.   

Los animales no humanos no deben de ser torturados ni maltratados, no deben de ser enjaulados ni encarcelados, como tampoco deben de ser usados como objetos de experimentación científica, explotados o comercializados, a los animales se les deben de respetar todos sus derechos que tienen que ver con la igualdad y la libertad. A los animales no se les debe de hacer sufrir, sean estos humanos o no humanos.  

 

Los animales no deben de ser meros objetos o propiedades, para ser usados por los humanos como les plazca.  

 

Los animales son seres inteligentes y sintientes con su propia forma y estilo de vida. A los animales no se les debe permanecer enjaulados, o dentro de un acuario.   

 

Nosotros los animales humanos debemos de luchar contra la crueldad de como muchas personas tratan a los animales que no son personas, los animales sufren y sienten tanto como nosotros. Los seres humanos debemos de tener amor y compasión por todos los seres vivos que habitan sobre el planeta tierra.

 

La violencia e inconsciencia humana no se debe de trasladar hacia los animales, ellos no deben de ser usados como medios de entretenimiento dentro de los circos o los zoológicos. Como tampoco deben de ser utilizados para nuestro almuerzo.   

 

A Los animales no humanos no se les debe de hacer sufrir y se les debe de permitir que permanezcan con vida, la vida humana no es más importante que la vida del resto de los seres vivos, todos en su conjunto pertenecemos al reino animal de la naturaleza. El sufrimiento y la muerte es dañina no importando si se es humano o no se es humano. No debe de existir discriminación o diferencias entre las distintas especies de animales que habitamos la tierra, no tan solo los seres humanos desean estar vivos y desean no sufrir, esta sería una muy buena razón para no hacer sufrir a los animales como también para no matarlos.  

 

De igual forma en que tratamos de defender los derechos humanos y tratamos de defender la vida de los seres humanos, debemos también de hacer lo mismo con los derechos del resto de los animales, salvarlos del dolor, del sufrimiento, del terror y de la muerte. Los animales luchan con todas sus fuerzas por permanecer vivos.   

 

Los elefantes son las mamás más protectoras del planeta, los mismos elefantes al igual que otras especies de animales también lloran a sus muertos como lo hacen los animales humanos, mientras que las vacas recogen ramitas y hojas para cubrir el cuerpo del difunto. Esto prueba que el amor, el afecto, el cuidado, os sentimientos y el instinto maternal no son cosas exclusivas de los seres humanos. Los animales también necesitan amor, apoyo y protección.

 

Los perros también lloran la muerte de sus amos.   

 

Los intereses de los miembros de la especie humana, no deben de ir en contra de los intereses de los miembros de otras especies, que nos hace pensar que los seres humanos que habitamos el planeta tierra somos los únicos que tenemos derecho de habitarla en completa igualdad y libertad. La industria animal para el consumo humano es toda una barbarie y toda una crueldad, al igual que lo es la matanza de animales en deportes sangrientos, corralejas, corridas de toros y rodeos y la experimentación científica con animales. Se matan de manera muy sangrienta y cruel a grandes elefantes para tan solo comercializar el marfil de sus colmillos, y se asesinan a millones de otras especies de animales para comercializar su carne o su piel.    

 

De que les sirven las facultades mentales a los seres humanos si con dicha supuesta inteligencia están destruyendo el ecosistema, están destruyendo y extinguiendo a los demás seres vivos. Los seres humanos se jactan de ser animales superiores, porque tienen sentidos, intuiciones, memoria, emociones y facultades como el amor, la memoria, la curiosidad, la imitación la razón, si estas mismas cosas también suelen encontrarse en un estado incipiente, e incluso mucho más desarrollado, en los animales inferiores no humanos.   

 

El judaísmo, y el cristianismo católico y protestante son los mayores cómplices de todas estas injusticias, crueldades, extinciones y barbaries cometidas en contra de los animales no humanos, porque separan al hombre del mundo de los otros animales que también sienten y sufren. Ellos consideran a los animales como meros objetos creados para el beneficio de los seres humanos.    

 

Mientras que el budismo y el brahmanismo, reconocen un parentesco entre los humanos y el resto de los animales. Además, la esclavitud no es propia de los seres humanos, a los animales también se les esclaviza en muchos casos. La esclavitud de los animales también debe de ser abolida, ellos también merecen un trato amable, no hay que descuidarlos ni maltratarlos, ellos también merecen amor, misericordia, compasión y ternura. El planeta tierra no fue creado exclusivamente para ser habitado por la especie animal humana.   

 

En la misma medida en que existe el racismo entre la raza humana, en donde los blancos tienen mucho valor que los negros por supuestamente ser inferiores a los blancos, los animales humanos son racistas para con los animales, los separan según su raza, su sangre y su linaje, según su pedigrí o su finura, los demás son tan solo perros callejeros a los cuales toca maltratar y matar.   

Las grandes matanzas de animales son similares a los grandes holocaustos o genocidios humanos. La grandeza de un ser humano espiritual se ve reflejada en cómo trata a los animales. Desde tiempos inmemoriales, la India ha sido conocida por ser un país donde los animales han sido adorados.

 

Según la mitología hindú, se adora a la vaca, el tigre, el león, el elefante, el caballo, el toro, la serpiente y el mono por ser considerados animales sagrados. Mientras esto sucede en la india, en otros lugares del planeta todos los días millones de animales de distintas especies están experimentando una crueldad insoportable. En pleno siglo 21 aún en algunos lugares de China y en Filipinas se continúa comercializando la carne de perro, sin antes no haber pasado por las peores crueldades y sufrimiento estos fieles y amorosos animales.   

 

Los animales humanos, somos los inhumanos de nuestra especie. Lo que nos hace seres humanos es la humanidad, la compasión, la protección y el amor por todo el reino animal, el ser compasivos y amorosos es lo que nos hace humanos. Pero la realidad es que la raza humana está compuesta en su mayor parte por entidades inhumanas, descorazonadas, muy crueles, dañinas y destructivas, no solo para con los miembros de su misma especie, sino también para con las demás especies de animales no humanas. Los humanos hemos perdido el significado de humanidad incluso entre los de nuestra propia especie.    

 

Ahora si Hemos podido entender que es lo humano, lo no humano y lo inhumano. Los seres humanos inhumanos no solo se alegran de ver sufrir a las demás personas, sino que también se alegran de ver sufrir a los animales que no son personas. Los seres humanos somos muy crueles porque nos falta humanidad, amor y compasión, no solo para con nosotros mismos sino también para con las demás especies.  

 

 

Revelación escrita por el espíritu de la verdad eterna Rubén Lòpez.