A este mundo y a esta civilización les queda muy poco tiempo.

 

Revelación escrita por el espìritu de la verdad eterna Rubèn Lòpez.

 

El colapso de la civilización. 
 
Estamos entrando en una era de desastres naturales sin precedentes. Y con amenazas de una guerra nuclear que terminará en un verdadero apocalipsis. La extinción parcial de especies es inminente. Las aniquilaciones de los ecosistemas hundirán al Homo sapiens en un peligro mortal. La inteligencia artificial hará su propio trabajo y será más que sucio.
 
El registro histórico muestra que los informes y las profecías del fin de los tiempos siempre resultaron estar equivocados. Pero esta vez será distinto. De las ruinas surgirá una nueva civilización. Primitiva pero llegará. Esto no significa que nos dirigimos hacia la perdición total, sino que vamos hacia el cambio que la humanidad necesita para que se acaben para siempre las injusticias, las crueldades, la miseria y la codicia. Y para que no se le haga ya más daño al planeta tierra. A partir de los muy pocos sobrevivientes.
 
Las ruinas nos recuerdan que civilizaciones complejas y sofisticadas colapsaron en el pasado. Esta civilización no será la excepción.
 
El colapso social, la caída de gobiernos, el aumento de la violencia, nuevos virus y enfermedades, catástrofes naturales, guerras, pestilencia, hambrunas, colapso económico, exceso de población, migración, sabotaje, conspiraciones. Graves daños en el ecosistema, contaminación ambiental grandes injusticias, el aumento de la desigualdad y la extinción de especies de animales. Estas cosas nos harán desaparecer por completo regresando al estado más antiguo y primitivo.
 
Prácticamente todas las civilizaciones del pasado han sufrido este mismo destino, independientemente de su tamaño o complejidad. La extinción completa de una cultura no es inevitable y, en algunos casos, las nuevas sociedades que surgen de las cenizas de la antigua son evidentemente sus descendientes. El colapso se entiende como un "fin total" de los sistemas políticos, económicos, culturales, militares y religiosos.
 
Desastres naturales como tsunamis, terremotos, pandemias, incendios forestales, el agotamiento d los recursos, la super población  y el cambio climático van a precipitar el gran colapso de esta civilización. Las grandes civilizaciones no son asesinadas. Ellas mismas se quitan la vida. Son 28 civilizaciones diferentes las que han tenido su ascenso y su caída. 
El destino que tuvieron las civilizaciones anteriores a la nuestra es la hoja de ruta hacia nuestro futuro: La inminente extinción. 
 
Las armas disponibles de varios países van desde agentes biológicos hasta armas nucleares. Con la proliferación de armas nucleares, ya hemos alcanzado el punto de “velocidad terminal” para esta civilización. La guerra nuclear en sí misma es un riesgo existencial: o la extinción de nuestra especie o una catapulta permanente de regreso a la Edad de Piedra.  ,
 
Nuestras capacidades tecnológicas también presentan amenazas sin precedentes a las que ninguna civilización ha tenido que enfrentarse. Estamos llegando al punto sin retorno. Esta civilización está al borde del colapso.  Israel y Rusia están poniendo en peligro la supervivencia de la civilización.

El Espíritu de la verdad eterna Rubén Lòpez.

 

correo de contacto: 
 
rubendarisaristi@hotmail.com
 
Colombia.