El fin del mundo y la llegada del anticristo.

 

Revelación escrita por el espìritu de la verdad eterna Rubèn Lòpez.

 

Soy cristiano primitivo original. Por lo tanto no soy ni católico, ni judío, ni islamista, como tampoco protestante.

 

A través de las matemáticas y los alfabetos se puede interpretar a la perfección los códigos bíblicos y a esta sabiduría se le conoce desde los tiempos más antiguos como: la gematría, la cual es totalmente bíblica.   

 

 

La cronología bíblica y los distintos cálculos matemáticos apuntan en la dirección de qué nos estamos acercando cada vez más hacia la fecha exacta del fin de los tiempos. 

 

Grandes hombres matemáticos, filósofos y científicos como Isaac Newton, Pitágoras entre otros, han relacionado la vida espiritual y todo lo relacionado a Dios y a la creación con las matemáticas, la geometría y la gematrìa, hasta llegar a afirmar que todo lo creado es números, así mismo lo pensaba la elite de rabinos del judaísmo más antiguo y los grandes sabios de Grecia.      

Las señales que confirman de manera contundente de que ya han llegado los tiempos del fin del mundo, es la presencia del anticristo y de otros muchos anticristos. Se acerca apresuradamente un apocalipsis nuclear, una gran hecatombe, una gran extinción humana.           

 

Mucha atención porque se acerca un gran final y ya nada volverá a ser igual, llega una nueva tierra, una nueva civilización, un nuevo hombre, un nuevo mundo, un nuevo ser humano, una nueva creación, una nueva cultura ecologista y una nueva manera de pensar.    

 

Mucha atención porque le llega el fin definitivo al consumismo materialista, le llega el fin definitivo a todos los poderes malignos injustos, crueles y hostiles que gobernaban sobre los más débiles e indefensos.      

 

Llega el establecimiento de un reino terrenal propio de seres humanos espirituales no dañinos, perversos, injustos y destructores, será el fin de los dueños absolutos de este mundo cruel e injusto que nos explotaban, sometían y pisoteaban como se les venía en gana.         

 

Mucha atención porque la babilonia maldita del imperio mundial de las religiones falsas va a ser destruida en su totalidad, incluyendo las iglesias y catedrales del vaticano y los centros de culto protestante y ortodoxo.      

Viene un nuevo mundo para esta bendita tierra sin la especie maligna destructora, codiciosa, y muy malvada que la habitaba.      

Los verdaderos hijos de la tierra la habitarán y la cuidarán mientras que los injustos, los explotadores y destructores desaparecerán para siempre, las cosas viejas serán hechas nuevas, el mundo pavimentado civilizado desaparecerá para siempre y se comenzará a vivir en pequeñas comunidades, no habrá más lamentación, sufrimiento ni llanto, de pecado, de guerras ni injusticias se hablará más.       

Viene un nuevo mundo, una nueva manera de pensar, viene una nueva tierra y sin sus depredadores, viene un gran cambio, viene una nueva cultura, viene una nueva humanidad.      

 

Han comenzado los tiempos del fin y la raza humana debe de estar preparada, el Vaticano junto a la religión católica, ortodoxa y protestante, y el resto de las religiones falsas del planeta tierra tienen el tiempo contado, de los líderes religiosos no quedará ni el rastro.      

 

La tecnología junto al mal llamado "mundo civilizado pavimentado" va a comenzar a desaparecer de la faz de la tierra y de este no irá a quedar nada, la naturaleza se lo tragará entero.       

 

Le habrá llegado el fin definitivo de los ricos y poderosos dueños absolutos de este mundo, les habrá llegado el fin definitivo a las celebridades del cine y la televisión al igual que para los astros del fútbol y demás deportistas de élite.     

Se pueden ir despidiendo desde estos mismos momentos del cine y de la televisión, del Internet y de las redes sociales, de los celulares, twitter, tabletas y cosas similares, se pueden ir despidiendo desde ahora del resto de comodidades que ofrecía este mundo plagado de crueldades, barbaries e injusticias.      

 

Los triunfadores y ganadores, los primeros y vencedores, los hombres codiciosos de éxito y de pensamientos muy positivos tienen sus días contados.      

 

Se pueden ir despidiendo desde ya del mundo capitalista y consumista que conocemos, al igual que de los gobiernos socialistas y comunistas, y de las monarquías ricas y poderosas de control global.      

Se pueden ir despidiendo desde ya de los reinados de belleza, de las modas y modelos, al igual que de los mundiales del fútbol y de los juegos olímpicos, deportes paganos que movían las pasiones y emociones para satisfacer a las entidades malignas y perversas del espacio exterior a las cuales llamaban dioses, ángeles o divinidades quienes eran los que les otorgaban sus inmensas riquezas materiales.     

Le habrá llegado el fin definitivo a los grandes empresarios, industriales y terratenientes quienes siempre han explotado y tratado como esclavos a las clases menos favorecidas a los cuales llamaban obreros, trabajadores o campesinos, le habrá llegado el fin definitivo a la distinción de clases sociales, llega la justicia, la equidad y la igualdad.     

 

Se pueden ir despidiendo desde ya de la comodidad que brindaba la energía eléctrica y del gran negocio del petróleo y de sus derivados que contaminaba al planeta tierra, destruía a la naturaleza viva, y que era la que movía a esta civilización plagada de crueldades y de injusticias.    

 Llegan los tiempos en que tendrán que cambiar sus lujosos y costosos autos por bicicletas, y la energía por velas y velones porque se volverá a vivir de manera primitiva como en los tiempos más remotos, dejarán de existir los supermercados y alimentos artificiales y contaminados, se vivirá de lo que brote de la madre tierra.      

 

Le llega el fin definitivo a la economía mundial basada en el oro y el petróleo, sin bancos no habrá dinero, el campo será la mejor opción, las grandes ciudades serán una verdadera carnicería humana, todos como en jauría saldrán enloquecidos por algo de comida.      

Le llega el fin definitivo a todo tipo de maldad sobre el planeta tierra, ya no más traficantes, drogas ni consumidores, ya no más bebidas alcohólicas ni borrachos, ya no más pornografía, violaciones ni trata humana, ya no más políticos, jueces ni abogados perversos, malignos y corruptos.   

 

Por fin llega la justicia, la paz, el cambio, la esperanza y la igualdad, le ha llegado el descanso merecido a la santísima madre tierra que venía siendo destruida de manera inmisericorde por parte de los dañinos y perversos seres humanos que tan solo iban tras las riquezas materiales, le ha llegado el fin a toda clase de engaños, mentiras y manipulaciones que venían por parte de los distintos líderes religiosos, políticos, empresariales, culturales y militares.      

Sobre el planeta tierra no volverá a existir ninguna especie humana codiciosa, injusta y avarienta, será el fin definitivo de los explotadores de los más pobres, humildes, débiles e indefensos, será el fin definitivo para todo tipo de ladrones, delincuentes, estafadores, bandidos y malhechores.      

 

Sin el dinero creado por el mal llamado mundo civilizado se regresará al trueque y al intercambio, y de las grandes selvas pavimentadas con tecnología, lujos, comodidades y derroche se regresará a a vivir en pequeñas comunidades para comenzar desde cero a vivir de manera natural de todo lo que ofrece el campo.     

 

El dinero atesorado en los bancos no valdrá nada, la economía mundial estará sobre el piso, los lujosos yates, aviones privados, y las lujosas mansiones serán cosas del pasado, los ricos y poderosos andarán vagabundos sobre las calles confundidos entre los más pobres buscando la superveniencia.     

 

Ningún medio de comunicación les podrá informar sobre lo que está sucediendo al otro lado del mundo porque estarán incomunicados para siempre.       

 

El Espíritu de la verdad eterna Rubén Lòpez.

 

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Colombia.