El Estado de Israel la tierra maldita manchada con la sangre de mucha gente inocente.  

 

La historia mal contada de las tierras de Canaán.    

 

Isaías 41:2-4  

Yo Soy Jehová el dios de Israel, Yo soy el único dios y mantengo bajo control todo lo que pasa en este mundo.    

 

Yo Jehová he existido desde el principio y existiré hasta el final.    

En el versículo anterior Jehová de los ejércitos admite que él no es una entidad eterna porque tuvo un principio como también admite que tendrá un fin.    

 

Los mártires de Canaán.    

 

Israel no es ninguna tierra Santa, por el contrario, es una tierra maldita manchada de sangre inocente. Canaán son las tierras antiguas de una región de Asia Occidental situada entre el mar mediterráneo y el río Jordán tierras que en la actualidad se llaman el estado de Israel, Palestina (La franja de Gaza y Cisjordania) La zona occidental de Jordania y algunos puntos de Siria y Líbano.   

La historia de Canaán se remonta al año 3000 antes de Cristo. Los cananeos eran un pueblo mercader igual que cualquier pueblo de la actualidad en donde se conforman distintas familias y tienen credos religiosos y formas de vida diferentes, si se habla de pecado, de maldad y de perversión, los podemos encontrar más fácil en el mundo civilizado de la actualidad que entre los integrantes del pueblo cananeo.   

 

El pueblo cananeo adoraba a otros dioses que no era el dios de los hebreos de la antigüedad, como por ejemplo Los Budistas adorar al Buda o los hindús adorar a Krishna, no existía nada de malo en esta posición porque se trataría de tolerancia religiosa, los Hebreos odiaban a los Cananeos porque estos adoraban a otros dioses que no era su dios llamado Jehová de los ejércitos porque en la Tora o lo que llaman hoy en día el antiguo testamento decía que no se podía adorar a otro dios que no fuera Jehová.    

 

Si los Hebreos odiaban a los Cananeos por no creer en Jehová, el mismo Jehová también odiaba a este pueblo trabajador, humilde e indefenso conformado por niños y adultos, mujeres y ancianos y por esto el mando a masacrar. Jesús de Nazaret llegó millones de años después a estas mismas tierras para decirle a sus habitantes que su dios Jehová era un maldito genocida y que es el mismo diablo o Satanás, Israel no ha sido ningún pueblo sufrido, el verdadero pueblo sufrido fue el de los Cananeos de la antigüedad y el de sus descendientes que son los Palestinos de la actualidad los verdaderos dueños del estado e Israel.    

 

Jesús les dijo los judíos que lo iban a matar y a crucificar lo siguiente:   

 

Juan 8.43   

¿Porque no entendéis mi lenguaje?    

 

Porque no podéis escuchar mi palabra.   

 

Vosotros sois de vuestro padre el diablo que ha sido un homicida y un genocida desde el principio, es el padre de la mentira.   

 

A continuación, vamos a ver si de verdad Jehová al cual se refiere Cristo como el diablo o satanás es un Genocida y un homicida.    

Homicida: Que mata personas.    

 

Genocida o genocidio: Delito internacional que comprende cualquier acto de destruir total o parcialmente a un grupo nacional étnico, racial o religioso como tal.   

 

Estos actos comprenden matanzas y lesiones graves contra la integridad físicas de las personas.    

 

Lo sucedido en las tierras de Canaán es exactamente un genocidio o una gran matanza de seres humanos inocentes e indefensos, si para Hitler el holocausto Nazi era su solución final que era el de cometer un genocidio para eliminar la religiosidad judía, para Jehová en los tiempos de Canaán se trataba también de su solución final cometiendo un gran genocidio para eliminar la religiosidad de los cananeos.    

 

Los seguidores de Hitler son cómplices de un gran asesino genocida considerado una bestia humana muy cruel y violenta, de la misma manera los creyentes de Jehová son cómplices de este otro gran asesino y genocida también considerado ser una bestia muy cruel, vengativa e inhumana.  

 

Esto significaría que en los tiempos actuales Jehová debe de estar odiando y espera masacrar a más de 5 mil millones de personas de este mundo que no creen en su sarta de mentiras, mientras que sus creyentes alabarían en sus iglesias esta otra gran mortandad humana que se avecina, convirtiéndose de nuevo en cómplices de esta bestia infernal.    

 

El único motivo por el cual Jehová envía a un grupo de mercenarios, y asesinos a la cabeza de Josué para matar sin piedad a todo lo que tuviera vida sobre las tierras de Canaán era el de que este pueblo no adoraba a la bestia Jehová de los ejércitos quien siempre ha sido el diablo o satanás, el cual usa la conversión forzada estilo inquisición católica, quien no cree en Jehová debe de ser eliminado de la faz de la tierra.    

 

Significado de Invasión: Una invasión consiste en la entrada de las fuerzas armadas a otro territorio que no es el de ellos con el objetivo de conquistarlo o tratar de cambiar el gobierno establecido.   

 

Lo sucedido en Canaán fue una invasión en donde se cometió un gran genocidio para conquistar o despojar de sus tierras a sus verdaderos dueños de la manera más cruel y sangrienta.  

La historia comienza con la promesa de Jehová de entregarle al pueblo hebreo unas tierras que no eran de ellos a lo que se le conoce con el nombre de la tierra prometida y para conseguirlo tenía que ser a la fuerza y de la manera más sangrienta, matando a todo lo que tuviera vida incluyendo, niños, adultos, mujeres embarazadas y animales de toda especie, robando también todas sus pertenencias e incendiando todos sus pueblos o caseríos, para lograr este objetivo, Jehová consiguió reunir a 8 mil mercenarios a la cabeza de una bestia asesina llamado Josué que era peor que el mismo Hitler pues era más guerrero, más cruel y más despiadado.     

 

Vamos desde el principio: Canaán: La tierra prometida. 1250 años antes de Cristo, las murallas de Jericó se derrumbaron ante la presencia del ejército del sucesor de Moisés como lo era el gran mercenario y genocida llamado Josué, esta fue la primera tierra conquistada por los hebreos en donde llegaron 8 mil mercenarios a la cabeza de Josué para asesinar sin piedad a unos 2500 habitantes de esta pequeña tierra, arrasando con todo lo que se les atravesara por su camino.   

 

Y es gracias a esta primera gran matanza de gente inocente que los malditos cristianos crueles e igual de despiadados que sus profetas, componen letras para ser cantadas en alabanzas para Jehová por los niños y los adultos en unos antros de mala muerte a los cuales llaman centros de culto en donde se encierran a celebrar estos actos delictivos tan atroces y violentos pues se alegran de la muerte de todos los niños y las mujeres, de los jóvenes y ancianos de esta pequeña tierra con el único objetivo de cometer el primer genocidio en nombre del dios maligno Jehová de los ejércitos.    

 

El ejército de los hebreos exterminó sin piedad alguna a todos sus pobladores y luego continuaron de pueblo en pueblo arrasando o exterminando todo lo que tuviera vida, de esta manera fue que conquistaron toda la tierra de Canaán, estos territorios que fueron tomados a la fuerza y que se las robaron a sus verdaderos dueños es lo que se llama hoy en día El estado de Israel, tierra que es maldita y no para nada tierra Santa, es tierra manchada de sangre de gente humilde e indefensa, en estos episodios no hubo una guerra de igual a igual, pues Jericó tan solo se estaba defendiendo de los ataques feroces de los 8 mil mercenarios hebreos con tan solo 600 o 700 soldados de este pequeño pueblo, a los demás habitantes que se encontraban desarmados incluyendo a las mujeres y a los  niños los mataron a espada dejando un gran río de sangre por todas sus calles y en sus propios hogares.  

  

¿Es Josué un héroe?    

 

¿Es Josué una entidad espiritual?    

 

Ni lo uno, ni lo otro, no es ni héroe como tampoco es una entidad espiritual, se trata más bien es de uno de los peores criminales y mercenarios que ha tenido la humanidad en toda su historia, fue un militar de alto rango al servicio del maldito Jehová de los ejércitos, Josué conquista a la fuerza a Canaán y luego se las reparte a las 12 tribus de Israel.   

 

¿Creen ustedes posible que Cristo haría parte o sería cómplice de estas grande matanzas o genocidios en donde matan a todos los niños y mujeres indefensos?    

 

Los episodios de Canaán están relacionados a la política y al control global, nada tiene que ver con juicios contra pecadores o cosas parecidas, son acciones militares violentas para tomar a la fuerza tierras que no son de ellos, Josué era tan violento que no solo exterminó a toda la población de Jericó, sino que también con sus propias manos asesinó a 5 reyes de aquellas regiones, los ejércitos de Josué eran demasiado crueles, estas matanzas tan solo se debieron al fanatismo religioso de aquellos tiempos, es algo muy parecido a lo que hace el estado islámico en la actualidad, o lo que ha hecho la iglesia católica en toda su historia.

 

Jehová es el dios protector de los Israelitas, cualquier nación que se oponga al régimen constituido por el judaísmo debe de ser considerado enemigo de Jehová y enemigo del Estado de Israel.     

Moisés presenta a Jehová como al único dios o divinidad a la cual hay que adorar, pero esta divinidad tiene que ver es con control y mucho poder, nada tiene que ver con que sea una entidad espiritual, pura, santa o sagrada, por el contrario, este ser maligno adorado por judíos, católicos y protestantes, es lo más parecido a lo que representa un dictador al cual somete a su pueblo de la manera más cruel y despiadada.    

 

En Isaías 50 se puede leer con toda claridad como es la naturaleza oscura de este personaje, cuando dice:   

 

Yo soy Jehová, yo soy el único dios, fuera de mí, no hay otro dios, yo formó la luz y las tinieblas, yo creo la paz y también creo la adversidad, yo soy el Jehová que puedo amar y también puedo odiar, ese soy yo.    

 

La historia de la llegada del Mesías del Judaísmo tema en el cual involucran a Cristo, está relacionada con que este Mesías sería rey de Israel como lo fue Saúl, El Rey David o Salomón, y que liberaría a Israel de manera eterna.    

 

Primero,    Jesús de Nazaret no puede liberar a Israel de manera sangrienta y violenta, segundo, Cristo no podría ser Rey de Israel, porque el perfil de los reyes de Israel debe de ser del mismo perfil codicioso, mercenario y criminal de Jehová, de Josué, o de David, entidades malignas comprometidas con grandes genocidios y matanzas, y tercero, Cristo no podría ser rey de Israel una tierra que fue manchada de mucha sangre inocente, Cristo no podría ser Rey de un territorio que fue tomado a la fuerza en donde mataron a toda su población de manera muy cruel y sangrienta, el despojo de tierras ajenas es un delito muy grave y más cuando hay grandes matanzas.   

 

Jehová y su reino terrenal.    

 

Israel se le conoció con el nombre del Reino de Israel, debido a los Reinados de Saúl, de David y de Salomón y supuestamente vuelve a ser un reino con la llegada del Mesías del judaísmo, Jesús de Nazaret Jamás puede ser el rey de Israel debido a que los reinados terrenales tienen que ver es con la política,  las fuerzas armadas, las guerras, y con la economía, estos reinados terrenales nada tiene que ver con la espiritualidad y mucho menos con la salvación eterna, los creyentes católicos y protestantes han sido engañados todo este tiempo a nivel espiritual, les han metido gato por liebre pues el objetivo de Jehová al tener al pueblo hebreo como sus elegidos y darles tierras ajenas es controlar al mundo entero a través de dicha nación mediante el Sionismo Internacional dueños de la banca internacional y de todo el oro de este planeta tierra, oro que tanto codicia Jehová de los ejércitos.    

 

Jehová le promete al pueblo hebreo tierras que no son de él, tierras que ya tienen dueño, observen las promesas de Jehová:    

 

Éxodo 6:8  

Yo Jehová, los llevaré a la tierra que juré dar a Abraham, a Isaac y a Jacob, y os la daré por heredad. Como es posible que Jehová le dé como herencia al pueblo hebreo unas tierras que no son de él, esas tierras eran de los Cananeos, tampoco eran tierras de los elegidos de este maldito dios que invade terrenos ajenos a la fuerza y se los da a quien se le viene en gana dárselos.    

 

Génesis 12:7  

Y Jehová se le apareció a Abram, y le dijo: A tu descendencia daré esta tierra.    

 

Génesis 26:2 Jehová se le apareció y dijo: No desciendas a Egipto, quédate en la tierra que yo te daré.    

 

Reside en esta tierra y yo estaré contigo y te bendeciré porque a tì y a tu descendencia daré todas estas tierras.   

 

Siendo tan misericordioso y poderoso como lo quieren hacer ver sus malditos aliados creyentes de esta bestia, porque motivo siendo el planeta tierra tan grande, Jehová no les dio terrenos que no estaban ocupados, les ofreció fue terrenos ajenos que ya estaban construidos, tenían acueductos, animales cultivos, pues este dios maldito les dio ya todo servido y hecho, nada tuvieron que hacer los hebreos para fundar una nueva nación comenzando desde cero y con duro esfuerzo, los cananeos lo hicieron todo por ellos.    

 

¿De cuál sufrimiento de los Israelitas están hablando? El pueblo sufrido es el de Palestina quienes están reclamando sus tierras, ellos son los verdaderos dueños de esos terrenos, los Israelitas son intrusos en Israel, que por supuesto no se llama así, su verdadero nombre es Canaán o Palestina.    

 

Lean con mucha atención el descaro y el cinismo de este maldito dios maligno:    

 

Deuteronomio 6:10  

Y sucederá que cuando el Señor Jehová tu dios te traiga a la tierra que juró dar a tus Padres Abraham, Isaac y Jacob, unas tierras esplendidas, con grandes ciudades que tú no edificaste.   

 

Ustedes los ingenuos creyentes católicos y protestantes de esta bestia infernal son unos ignorantes y estúpidos que se alegran del dolor ajeno, no se dan cuenta que los habitantes de Canaán trabajaron duro de sol a sol y durante cientos de años para construir sus ciudades, tener su ganado, sus pocas pertenencias y sus familias, como para ver como de la noche a la mañana llegan 8 mil bandidos, delincuentes y mercenarios liderados por Josué y por órdenes de Jehová a quitar a la fuerza sus propiedades, robar sus terrenos y asesinarlos a todos sin piedad alguna, a niños y ancianos, a mujeres y hombres incluyendo la matanza de todos sus animales, para que luego de este genocidio, estos malditos vengan a vivir en tierras y en ciudades que ellos no construyeron, estas tierras untadas de sangre inocente, se llama hoy en día El Estado de Israel cuya capital es Jerusalén.    

 

Millones de personas visitan cada año a Israel considerada la tierra Santa, les pregunto a ustedes:   

 

¿Será que puede ser Santa unas tierras untadas de sangre inocente?    

 

¿Será que podrá ser santo un lugar en donde asesinaron crucificado de la manera más cruel y dolorosa a un humilde hombre que los estaba denunciando?   

 

Por el contrario, estas tierras del estado de Israel son malditas porque fueron tomadas a la fuerza y porque allí sucedieron muchas matanzas de personas indefensas e inocentes de cualquier cargo. 

 

Santos no son Jehová, Santos no son ningún Papa del Vaticano, Santos no son ninguno de los mercenarios asesinos del antiguo testamento a los cuales llaman profetas, los únicos verdaderos santos son el Cristo que advirtió que Jehová era un maldito Genocida y Santas son cada una de las personas mártires de las tierras de Canaán, si se debe de recordar alguna masacre y conmemorar un gran genocidio, es recordando a los habitantes de las tierras las cuales los despojaron y los asesinaron sin piedad alguna.   

 

Los mismos versículos bíblicos se refieren a desposeer, a quitar o a robar las propiedades de su verdadero dueño y esto es considerado un delito y a la vez un pecado muy grave.    

 

Deuteronomio 9:1  

Oye Israel: Hoy vas a pasar el Jordán para entrar a desposeer a naciones más grandes y más poderosas que las ciudades que tú.    

Desposeer es quitar, robar, hurtar a la fuerza los terrenos a sus verdaderos dueños y entrar en posesión quienes son sus intrusos.   

 

Génesis 15:7  

Y le dijo: Yo soy Jehová que te saqué de Ur de los caldeos, para darte esta tierra para que la poseas. Génesis 17:8 Y te daré a ti, a tu descendencia después de ti, la tierra de tus peregrinaciones.   

Toda la tierra de Canaán como posesión perpetua, y yo seré su dios, una tierra que mana leche y miel. 

    

A continuación les narraré episodio a episodio la forma en que se fueron tomando pueblo a pueblo y ciudad en ciudad arrasando con todo lo que tuviera vida en ese momento, los relatos son impresionantes, los únicos que se alegran de estos robos, saqueos, quemas y genocidios son los creyentes de Jehová de los ejércitos, si para el fin del mundo está el que Jehová y su gran ejército de ángeles malvados desaparezcan para siempre, así mismo debe de suceder con todos sus creyentes, que desaparezca para siempre de la faz de la tierra, se lo tienen bien merecido, por crueles e inhumanos, y que sientan también en carne propia lo que les sucedió a las familias de todo Canaán.    

 

Antes, les voy a poner un ejemplo muy sencillo de lo que sucedió en la antigüedad, ustedes tienen un pequeño terreno en donde edificaron una propiedad que consiguieron con mucho esfuerzo en el trascurso de muchos años, también lograron tener hijos y nietos, los cuales fueron criados con grandes esfuerzos y necesidades, sus hijos también formaron sus propias familias y así se fue formando una especie de clan familiar, pero resulta ser que ustedes y el resto de la familia no creen en Jehová, es más, no creen en ninguna farsa religiosa, entonces van a ver que les pudo haber sucedido a ustedes mismos y a toda su familia, si no vivieran en el mundo actual y más bien hicieron parte de los habitantes de alguno de los pueblos de las tierras de Canaán.    

Es muy sencillo, las ordenes de Jehová eran de desposeerlos de sus propiedades y de manera muy textual le dijo a sus mercenarios: vayan de ciudad en ciudad y no dejen nada que tenga vida incluyendo a los animales, maten a todos los hombres, violen a todas sus mujeres, abran el vientre de las embarazadas y estrellen sus niños contra las paredes, desde ese momento ustedes son los dueños de estas tierras que les prometí, las cuales son llamadas tierras santas.    

 

¿Les agradó el relato?    

No le desees al prójimo lo que no te gustaría que le hicieran a ustedes, pues esto es exactamente lo que sucedió en Canaán y de lo que se alegra los creyentes católicos y protestantes, quienes dejan de ser personas buenas, para ser más bien unos creyentes malditos y detestables por celebrar las muertes tan violentas que tuvieron estas humildes familias de Canaán a Las cuales despojaron de sus tierras y los asesinaron a filo de espada.    

Es por este motivo que estoy revelando mi verdadera identidad, pues el verdadero Cristo nada tiene que ver con esas masacres, nada tiene que ver con los intereses de Israel, nada tiene que ver con reinados terrenales, El verdadero Cristo no es ningún rey, a lo que viene este verdadero Cristo a es a revelar la verdad que los hará libres y está relacionado a revelar el gran engaño religioso del judaísmo, del catolicismo y el protestantismo.    

 

Lo que les estoy narrando eventos muy reales y muy bien documentados de los cuales ustedes mismos pueden comprobar su veracidad, es para que vean que cuando estos líderes religiosos manipulan a su antojo el judaísmo, les hacen ver otra realidad pues tan solo les muestran y mediante un lavado cerebral, lo poco que les sirve a ellos para sus intereses políticos, económicos y de control, mientras les ocultan la verdadera naturaleza de este maldito dios, religiosidad guerrera, amañada, mediática, perversa, dañina y destructora, de lo cual no hace parte el verdadero Cristo que está a favor de toda la humanidad y de toda la naturaleza viva del planeta tierra.   

 

A partir de estos eventos tan macabros y terroríficos propios de la naturaleza maligna de Satanás, es que nace el judaísmo para que millones de años después se funde la iglesia católica y luego las protestantes.  

 

El ejercito que masacró pasando por espada a todos los habitantes de los pueblos de Canaán eran feroces, despiadados e implacables, su líder era Josué y estaba al servicio de su superior que era Jehová de los ejércitos, Josué tenía como misión llevar a los hebreos a la tierra prometida, el primer gran episodio de esta aventura de miedo y de terror tuvo que ver con la extinción de todos los habitantes de Jericó y este sería apenas el comienzo porque las masacres debían de continuar de pueblo en pueblo hasta conquistar todas las tierras de Canaán, una misión plagada de sangre y de carnicería humana.    

 

El poderío miliar de Josué era impresionante, pues de manera inicial se trataba de 8 mil mercenarios de los más sanguinarios que existían en esos tiempos y luego ascendió a la cifra de 12 mil hombres los encargados de tomar a la fuerza pueblos que oscilaban entre los 2000 a los 4 mil habitantes, eran batallas extremadamente desiguales pues les quedaba muy fácil vencer a los ejércitos de 1000 hombres y asesinar al resto de las poblaciones civiles desarmadas las cuales estaban conformadas por los niños, mujeres y ancianos, se podrán imaginar ustedes mismos como llegaban estos malditos guerreros de Jehová a cada uno de los hogares de las familias de Canaán, violar a las mujeres y luego asesinarlas a sangre fría, y a sus pequeños hijos, esto no se le debe de desear ni a nuestros peores enemigos.    

Moisés es el líder de los Israelitas en esos tiempos y escoge a Josué el guerrero más malo y despiadado para que con su ejército se vaya a invadir y tomar a la fuerza las tierras prometidas por Jehová, el triunfo e Josué fue rotundo.   

  

Una invasión sucede cuando mediante una acción militar se entra a la fuerza a una entidad geo política en un territorio controlado por otras entidades semejantes con el objetivo de tomarse los territorios y cambiar el estilo de vida de sus habitantes, pero estos episodios van más allá de una simple invasión, pues se trataba de verdaderos genocidios en el cual el único objetivo era el de exterminar a todos los pobladores de dicha región no dejando con vida nada que respirara, por el simple hecho de que no creían en Jehová de los ejércitos demoníacos, como su único dios.   

No era necesaria tanta brutalidad y tanta muerte de gente indefensa, lo más humano sería haber dejado con vida a las mujeres, ancianos y niños y a los animales, pero no masacrarla de esa manera tan violenta, cruel y despiadada como lo hicieron.  

  

Qué necesidad había de que estos bandidos armados al servicio de Jehová llegaran a los hogares a violar a las mujeres y estrellar a los niños contra las paredes o decapitarlos a filo de espada, estas barbaries no son consideradas pecado alguno para Jehová, pero sí se consideraba pecado el hecho de ser gordo y por este motivo mató a muchas personas en la antigüedad, es pecado para Jehová no creer en él y por esto es que los extermina, pero no es pecado alguno cuando estos salvajes guerreros llegaban a violar y matar niños inocentes, no era pecado el tomar a la fuerza tierras que no eran de ellos, no era pecado el quitarles todas sus pertenencias, definitivamente Jehová es quien actúa de manera oscura, estas son las famosas obras del diablo o de satanás.    

 

Jesús viene para destruir estas obras malignas el diablo que actúan a través de las religiones judías, católicas y protestantes, la misma iglesia católica mató a millones de personas inocentes mediante el mismo método en las cruzadas y en la inquisición, y los asesinos despiadados inquisidores fueron elevados a la categoría de santos, pues estas matanzas no representaban pecado alguno para el vaticano pero sí es pecado el hecho de comer carne en semana santa, eran considerados herejes y debían de ser quemados o torturados hasta la muerte quienes no creían en los papas malditos y malnacidos los cuales deberían de estar en los mismísimos infiernos y no tenerlos en los altares como si de verdad fueran verdaderos santos.    

 

Los eventos de la toma de las ciudades de Canaán fueron una guerra desigual de exterminio humano, la misión era la de masacrarlos en su totalidad para que de esta manera pudiera entrar el pueblo hebreo a ocupar las ciudades que antes habitaban los cananeos, estas cosas tan horribles tan solo pueden estar en la cabeza de un dios maldito, en la cabeza de los profetas sanguinarios y en la cabeza maligna de todos sus creyentes, como se pueden alegrar  de que estos delincuentes guerreros mercenarios de Jehová hayan asesinado a niños y mujeres, jóvenes y ancianos y a todos los animales de cada una de las ciudades.    

 

Los habitantes de cada una de las ciudades que conformaban las tierras de Canaán no eran seres anormales y fuera de lo común, eran familias iguales a las que conforman las familias de estos malditos creyentes católicos y protestantes, familias algunas ricas y otras muy pobres, humildes muy sufridas, cada ciudad con sus gobernantes algunos buenos y otros malos y corruptos como los políticos de la actualidad, pero en cuestión de pecado y de perversión, existe mucho más en las ciudades de la actualidad que en la de aquellos tiempos cuando no existía la tecnología, las drogas, la pornografía, ni la malicia de los seres humanos de hoy en día, por lo tanto la muerte de estas personas son muertes injustificadas que no tienen perdón alguno.    

 

Antes de que llegara Abraham a la Mesopotamia antigua diciendo de que Jehová era el único dios, ya existían otras religiones, por lo tanto no se puede culpar a los habitantes de Canaán por ningún motivo porque se trataba de cuestiones de tradición y de cultura, además estas personas jamás supieron lo que era el cristianismo porque no había aparecido la figura de Cristo, por lo tanto tampoco se les puede tildar de anticristos como si se le puede decir que los judíos son anticristos porque no creen en Cristo y que los católicos y protestantes son unos hipócritas y desleales porque traicionaron al verdadero Cristo que les ofrecía la salvación y que les advertía que Jehová era el mismo diablo,  entonces porque cantar alabanzas a Jehová dando gracias por todas estas masacres efectuadas por sus malditos profetas mencionados en el antiguo testamento.    

 

Josué estaba obsesionado con su dios Jehová y estaba dispuesto a complacerlo en todas sus peticiones cometiendo las peores atrocidades e injusticias con el fin de complacer a este dios malvado y a Moisés su líder religioso, los delitos cometidos por Hitler o los de los miembros del estado Islámico, no son nada en comparación con lo que tuvieron que vivir los habitantes de las tierras de Canaán, pues Jehová les había dicho a Abraham: Iras y tomarás esas tierras, porque esas tierras yo se las prometí.   

 

¿Pero a que costo?    

 

El pueblo de Israel no sufrió para nada en estas guerras desiguales, todo lo consiguieron de la manera más cómoda y fácil, en la actualidad su piedra en el zapato es el pueblo Palestino que aún sufre, mientras que los Israelitas esperan al Mesías que les va a asesinar a sus enemigos los Palestinos para que así se puedan declarar totalmente salvos de quienes están reclamando las tierras de su pertenencia.    

 

Para pode continuar con las masacres después de lo sucedido en Jericó, Josué debe de tomarse la población de Bethel en las montañas, se libra entonces una batalla a campo abierto en las ruinas de AI, en donde el pequeño ejército de Bethel es masacrado por los 8 mil hombres de Josué, otra ciudad muy fácil de ser tomada a la fuerza y conquistada.   

 

Después de los eventos de Bethel, Josué consigue aliados de varias tribus de las montañas y su ejército ya no son 8 mil, sino 12 mil hombres, se dirigen ahora hacia Gibeon cuyos habitantes estaban horrorizados con las masacres que este ejército había efectuado en Jericó y en Bethel, entonces los soldados de Gibeon se unen al ejército de los Israelitas aumentando de esta manera considerable el número de los integrantes del ejército de Josué.   

 

En las afueras de Gibeon Josué masacra a un gran ejército de los Cananeos a los cuales embosca los coge de sorpresa y prácticamente desarmados por lo que muchos de ellos huyen, pero el ejército de Josué los persigue porque el objetivo de no dejar con vida ni tan solo a un habitante de las tierras prometidas por Jehová a los Israelitas, luego Josué y su ejército avanzan conquistando y masacrando a todos los habitantes y animales de decenas de poblaciones cananeas. Josué ya viejo y cansado mueren en la más absoluta soledad y muy amargado, fue enterrado y nadie asistió a su funeral. Jehová no es ningún dios amoroso, misericordioso o protector, no es tampoco una entidad espiritual benigna de luz, por el contrario, se trata de un guerrero con tropas o ejércitos malvados celestiales y terrenales:   

 

Éxodo 15:3  

Jehová es fuerte guerrero, el señor es su nombre.  

  

Observen que el mismo Jehová considera enemigos a quienes estén en contra del control global, de ahí que el mismo Cristo era considerado como uno de sus peores enemigos al cual tocaba vencer y matar, y compara su naturaleza a la de un hombre de élite terrenal que crea las guerras:    

 

Isaías 42:13  

Jehová como guerrero saldrán, como hombres de guerra despertarán su celo, gritarán, sí lanzará un grito de guerra, contra sus enemigos prevalecerá.    

 

Jeremías 10:16  

Israel es la tribu de la heredad de Jehová, el señor de los ejércitos es su nombre.    

 

Joel 2:11  

Jehová da su voz delante de su ejército porque es inmenso su campamento, porque poderoso es el que ejecuta su palabra.    

Grande y terrible es en verdad el día de Jehová ¿Quién podrá soportarlo?    

 

Josué 5:14  

Josué dijo: Yo vengo como capitán del ejército de Jehová, y Josué se postró en tierra e hizo reverencia a Jehová. Así le habló Jehová a Josué dando las órdenes para dar inicio a las grandes matanzas o genocidios.   

 

En el libro de Josué podemos leer:    

 

Josué 1  

Después de la muerte de Moisés, Jehová le habló a Josué diciendo: Mi siervo Moisés a muerto, por lo tanto, levántate tu Josué y pasa el Jordán junto al pueblo, a las tierras que yo les doy a los hijos de Israel. Desde el desierto y el Líbano, hasta el gran río Éufrates, toda la tierra de los Heteos hasta el gran mar donde se pone el sol, será vuestro territorio, como estuve con Moisés también estaré contigo. Esfuérzate y sè muy valiente porque tú le repartirás a este pueblo las tierras que les he dado por heredad.     

Vamos a ver lo que significa heredad o herencia ya que Jehová promete dejarles a los Israelitas una herencia, las cuales son las tierras de Canaán. Significado de herencia: Acto jurídico mediante el cual una persona que fallece transmite sus bienes, derechos y obligaciones a una u otras personas.   

 

¿Jehová murió como para dejar una heredad o herencia?    

Una herencia se deja a alguien siempre y cuando yo tenga algún tipo de bien material, yo no podría dejar como herencia a otras personas cosas materiales que yo no tengo y que le pertenecen a otros, pues esto fue lo que hizo Jehová, prometer o dejar como herencia los bienes que le corresponden a otras personas y es por este motivo que desde aquellos tiempos antiguos hasta la actualidad, las tierras de Canaán o las tierras de Israel han tenido guerras constates y mucho derramamiento de sangre, porque sus verdaderos dueños reclaman lo que les pertenece, el maldito Jehová no tiene nada que le pertenezca a él en la tierra, por lo tanto no puede ir por allì, ofreciendo cosas que no le pertenecen, esto tan solo es propio de bandidos y delincuentes.    

 

Josué 1:11  

Entonces Josué le dijo a los oficiales de su ejército: Pasad por el campamento y dile al pueblo que preparen alimentos porque dentro de tres días pasarán el Jordán para entrar a poseer las tierras que Jehová les ha prometido.    

 

¿Qué clase de buen ejemplo de honestidad le da Jehová a su pueblo?    

 

Desposeer o robar tierras ajenas para que ellos las puedan poseer. Poco antes de salir a conquistar las tierras de Canaán, Josué le dijo a su pueblo:     

 

Josué 3:10  

En esto conoceréis a Jehová el dios viviente que está en medio de vosotros, pues èl echará de delante de vosotros al Cananeo, al heteo, al ferezeo, al gergezeo, al amorreo y al jebuseo. Jehová le promete a su pueblo masacrar a comunidades de seres humanos iguales a todos nosotros.    

 

Josué 4:1  

Cuando toda la gente hubo acabado de pasar el Jordán, Jehová le habló a Josué diciendo: Tomad del pueblo doce hombres, uno de cada tribu.    

 

Estas son las famosas doce tribus de Israel a las cuales se les repartieron las tierras de Canaán. Lean con mucha atención:   

 

Josué 4:10  

Todo el pueblo acabó de pasar el río Jordán y se hizo todo lo que Jehová había ordenado a Josué, había como cuarenta mil hombres armados, listos para la guerra, pasaron hacia la llanura de Jericó delante de Jehová.    

 

Con grandes masacres y amenazas de juicios finales es que Jehová amedranta y atemoriza a sus muy tontos, cobardes e ingenuos creyentes.    

 

Josué 4:24  

Para que todos los pueblos de la tierra conozcan que la mano de Jehová es poderosa, para que temáis a Jehová vuestro dios todos los días.   

 

Éxodo 15:16  

Terror y espanto cae sobre ellos; por la grandeza de tu brazo quedan inmóviles, como piedra, hasta que tu pueblo pasa, Oh Jehová de los ejércitos, hasta que pasa el pueblo que tú has comprado.   

 

Jehová no es una divinidad espiritual, tan solo es un individuo de élite que lucha por el control de toda la tierra, este diablo le da riquezas, poder y control a sus elegidos en la tierra.    

 

1 crónicas 29:12  

De ti proceden la riqueza y el honor, tú reinas sobre todo y en tu mano están el poder y la fortaleza, y en tu mano está engrandecer y fortalecer a todos.   

 

1 Samuel 17:46  

Jehová te entregará hoy en mis manos, y yo te cortaré la cabeza. Y daré hoy los cadáveres del ejército de los filisteos a las aves del cielo y a las fieras de la tierra, para que toda la tierra sepa que hay un dios todopoderoso en Israel.    

 

Salmos 76:7  

Tú, sólo tú has de ser temido: ¿Y quién podrá estar en pie en tu presencia en el momento de tu ira?    

 

Jeremías 10:17   

¿Quién no te temerá, Oh rey de las naciones?    

 

En la primera narración supimos la manera tan cruel en que Josué junto a sus 8 mil mercenarios se toman a la fuerza a Jericó, pero no bastaba con tan solo masacrar a todos sus habitantes, pues el objetivo es robar todas las riquezas de los Cananeos y es aquí cuando el codicioso por las riquezas materiales Jehová le dice a Josué:    

 

Josué 6:19  

Todas las riquezas, la plata y el oro, y los utensilios de bronce y de hierro, sean consagrados a tu dios Jehová, que estos tesoros, entren a hacer parte de los tesoros de Jehová.  

 

Queda muy claro que Jehová no habla de tesoros espirituales o celestiales, deja muy claro que lo que a este diablo le importa, es las riquezas materiales y sobre todo el oro y la plata. En otras tomas violentas se puede leer:    

 

Números 31:11  

Y tomaron todas las riquezas, todo el despojo y todo el botín, tanto de hombres como de animales.    

 

2 Samuel 8:11  

El Rey David dedicó y consagró a Jehová, todo el oro y la plata de todas las naciones que él había sometido.     

 

1 crónicas 18:11  

El Rey David consagro a Jehová, todo el oro que había tomado de todas las naciones: de Edom, de Moab, de los hijos de Amón, de los filisteos, y de Amalec.    

 

No queda la menor duda que el Judaísmo, catolicismo y protestantismo es un estilo de vida materialista, consumista y económico basado en el oro las riquezas, se trata es de control global sobre los más pobres indefensos, para nada es una religiosidad espiritual para salvar almas como lo decía Jesús de Nazaret: Ningún rico entrará al reino eterno, dejen todas las cosas del mundo si desean se salvos, por el contrario se puede leer a lo largo y ancho del antiguo testamento que Jehová le promete oro y muchas riquezas a quienes le sean fieles, ordena también que le construyan un templo forrado con toneladas de oro, dice que todo el oro que le roben a las naciones se lo consagren a él, y como si esto fuera poco, le da a Salomón 666 talentos de oro cada año. Jehová es el precursor de los esclavos y de la destrucción de la tierra, pues para conseguir el tan codiciado oro se debe de destruir y contaminar a la madre tierra y extraerlo con manos de esclavos.    

 

1 crónicas 26:20  

Y los levitas, sus parientes, estaban a cargo de los tesoros de la casa de Jehová y de los presentes consagrados.    

Si Jehová codicia tanto el oro por qué motivo destruye la tierra para extraerlo, se lo roba a sus dueños, o si es un dios tan poderoso, porque no dice: hágase el oro, y el oro es hecho, como supuestamente dijo: hágase la luz y la luz fue hecha, es cuestión de sentido común ingenuos creyentes de este diablo ladrón, mentiroso, codicioso y genocida.    

 

Debido a la codicia por el oro de este dios maldito es que existen muchos personajes siniestros que le sirven como lo son los distintos líderes religiosos a quienes Jehová les da mucho oro a través de diezmos y primicias. Cuando se refieren a que roben el oro o reciban ofrendas para ser consagradas a Jehová, en realidad no son para este maligno dios, es el pago que le da Jehová a estos sinvergüenzas líderes para que publiciten su nombre en todas las naciones.  

 

Este es el macabro relato de la toma de Jericó el primer pueblo conquistado de Canaán.   

 

Josué: 6:21  

Y destruyeron a filo de espada todo lo que en la ciudad había, hombres y mujeres, jóvenes y viejos, hasta los bueyes, las ovejas, y los asnos.   

 

Y le prendieron fuego a toda la ciudad, y todo lo que en ella había, solamente pusieron en el tesoro de la casa de Jehová la plata y el oro, y los utensilios de bronce y de hierro.    

 

Estas habían sido las órdenes perversas y malignas del diablo Jehová:    

 

Deuteronomio 20:16  

En las ciudades de estos pueblos que Jehová tu dios te da en heredad, no dejarás con vida nada que respire.     

Josué 8:1  

Dijo Jehová a Josué: Levántate y sube al pueblo de Hai. Yo te entrego en tu mano al rey de Hai, a su pueblo, a su ciudad y a su tierra.    

 

Y harás a Hai y a su rey lo mismo que le hiciste a Jericó, no dejarás con vida nada que respire. Dijo Josué: Vosotros os levantaréis de la emboscada y tomaréis la ciudad que Jehová le entregará en vuestras manos. Cuando la hayáis tomado, le prendiereis fuego, Haréis todo lo que Jehová te ha ordenado.    

Y tomó como cinco mil hombres, y los puso en emboscada entre Bet-el y Hai, al occidente de la ciudad. Jehová el genocida más terrible en toda la historia humana, culpable de asesinato de niños, mujeres y ancianos, cuyos cómplices de estas matanzas de gente inocente e indefensa son los creyentes judíos, católicos y protestantes quienes le celebran a este maldito dios todas estas crueldades.    

 

Josué 8:24  

Los israelitas acabaron de masacrar a todos los moradores de Hai en el campo y en el desierto, todos cayeron a filo de espada hasta ser consumidos, y el número de los que fueron asesinados y masacrados aquel día entre hombres y mujeres y niños, fue de doce mil, todos los habitantes del pueblo de Hai, Josué no retiró su mano que había extendido con su lanza, hasta que hubo destruido por completo a todos los moradores de Hai. Se trataba de un gran exterminio humano con el fin de borrar del planeta tierra a todo aquel que no creyera en satanás Jehová.    

 

Josué 8:28  

Josué quemó a Hai y la redujo a un montón de escombros, asolada para siempre hasta el día de hoy.    

 

Si en lugar de Josué y su ejército de mercenarios, hubiesen sido los líderes religiosos y sus respectivos creyentes católicos y protestantes quienes hubieron recibido las ordenes de Jehová, hubiesen sido estos pastores, papas y sus creyentes los que hubiesen masacrado a millones de personas indefensas, hubieran estrellado a los niños contra las paredes, es más, si Jehová les diera la orden en este mismo momento de que se fueran a masacrar a todos los hombres, mujeres, ancianos y  niños que no crean en él, ya estarían preparando el material de guerra para complacer a su maldito dios de tinieblas, crueldad y perversidad, de los fanáticos religiosos de este diablo todo se puede esperar, ya lo ha hecho la religión católica y nada tiene de raro que lo vuelva a hacer en el fin de los tiempos, El Josué de la actualidad sería el Papa y su ejército serían todos sus creyentes, incluyendo a los protestantes, todos al servicio del Sionismo Internacional.    

Lean con mucha atención:    

 

Josué 8:30 Después de las masacres de Jericó y de Hai en donde no quedó nada con vida, Josué edificó un altar a Jehová el dios de Israel en el monte Ebal, Los israelitas ofrecieron holocaustos a Jehová, y sacrificaron ofrendas de paz.    

 

También escribió sobre las piedras del templo una copia de la ley de Moisés, la cual escribió delante de los hijos de Israel.     

Después de estas primeras masacres, continúan más masacres y esta vez de más animales indefensos: Holocausto: Sacrificios religiosos entre los judíos en el cual se quemaba a la víctima completamente. Ofrecen sacrificios de Paz: La ofrenda de paz o zebach es conocida como compañerismo, de manera literal es sacrificio de mucha felicidad.    

 

Consistía de un buey o una cabra, macho o hembra. El sacerdote rociaba sangre en el altar mientras el hígado, los riñones y la grasa eran quemados en el altar. Atención: Jehová reclamaba la parte más rica del animal. Al sacerdote se le daba el pecho y el muslo derecho, El adorador tenía que comer todas las sobras de la comida.  

 

Por último, Josué después de estas dos masacres iniciales en donde asesinó, violó a las mujeres, mató niños y jóvenes, robó, hurtó las riquezas y las tierras de los Cananeos, escribió en las piedras del templo copia de la ley de Moisés entre la cual se encuentran los diez mandamientos en los cuales algunos de ellos dicen: No matarás, no hurtarás, no desearás los bienes ajenos, no codiciarás a la mujer de tu prójimo.    

El primero que quebranta o no cumple estas leyes es el mismo maldito dios que las escribió en piedra y luego fueron publicitadas por Moisés quien recibe las ordenes de asesinar a todo lo que tenga vida en Canaán.    

 

Si la humanidad se horroriza ante el gran holocausto Nazi, se debe de horrorizar mucho más por el gran holocausto efectuado sobre las tierras de Canaán lo que hoy en día es el estado de Israel. Holocausto es una gran matanza de personas con el fin de exterminar a un grupo social por motivos de raza, paralitica o de religión, y holocausto es exactamente lo que le sucedió a los cananeos por las manos sangrientas de Josué el Hitler de la antigüedad. Ahora el turno es para el pueblo de Gabaón y otros pueblos de Canaán.  

 

Josué 10:10  

Jehová lleno de ira y de consternación, hirió con una gran mortandad el Gabaón, y los siguió por el camino que sube a Bet-Horòn, y los mató hasta Azeca y Maceda.  

 

Mientras Josué los perseguía en la bajada de Bet-Horòn, el valiente Jehová les arrojó desde el cielo grandes piedras sobre ellos hasta Azteca y todos ellos murieron aplastados, y fueron más los que murieron por las piedras del granizo lanzado por Jehová que los muertos por espada en manos de los israelitas.    

 

Josué 10:26   

Josué hirió y mató a cinco reyes de cinco pueblos y los hizo colgar en cinco maderos, y quedaron colgados hasta cae la noche.    

La agenda de Josué era muy ocupada, En aquel mismo día en que Josué mató a los cinco reyes, Josué tomó al pueblo de Maceda y la hirió a filo de espada, y mató a su rey, por completo los masacró a todos, junto a todo lo que había vida a ella incluyendo a todos los niños y los animales, sin dejar nada, e hizo al rey de Maceda como lo había hecho con el rey de Jericó.    

 

Josué 10:29  

Y de Maceda pasó Josué, y todo Israel con él, a Libna, y masacró a todos los del pueblo de libna. Jehová también le entregó estas tierras, Josué los hirió a filo de espada, con todo lo que en ella tenía vida, sin dejar nada. 

   

De Libna pasó Josué a Laquis, la hirió a filo de espada, y masacró a todo lo que tenía vida incluyendo mujeres y niños, no dejó con vida a ninguno de ellos.    

 

Josué 10:34  

De Laquis pasó Josué y todo Israel a Eglòn, masacraron a todos sus habitantes y no dejaron nada que tuviera vida, incluyendo, niños, mujeres, ancianos y animales. Luego pasó Josué a Debir con su ejército y la tomó, y a todas las ciudades, y las hirieron a espada, y destruyeron todo lo que allí dentro tenía vida, los masacraron a todos sin dejar nada con vida.    

 

Masacró Josué, pues, a todo lo que tuviera vida sobre la región de las montañas del Neguev, e los llanos y de las laderas, sin dejar nada con vida, todo lo que tenía vida Josué por órdenes de Jehová lo mató. Todas estas tierras las tomó Josué desde Gades hasta Gaza, y toda la tierra de Gosèn hasta Gabaòn, pues Jehová de los ejércitos peleaba por su pueblo amado Israel.    

El siguiente relato es terrorífico:    

 

Josué 11:6  

Jehová le dijo a Josué: mañana a esta hora yo entregaré a todos los cananeos muertos delante de Israel, desjarretarás sus caballos, y sus carros quemarás a fuego.    

 

Josué 11:8  

Y Jehová le entregó todos os habitantes de estos pueblos a Josué para que se fuera a masacrarlos, y los hirieron todos y los siguieron hasta Sidón la grande y hasta Misrefotmain, y hasta el llano de Mizpa al oriente, los masacraron a todos sin dejar tan siquiera a uno con vida.     

 

Josué tomó en el mismo tiempo a Hazor, y mató a espada a su rey, mataron a espada todo cuanto en ella tenía vida, destruyéndolo por completo, sin quedar nada que respirase; y a Hazor le prendieron fuego. Asimismo, tomó Josué todas las ciudades y a todos sus reyes y a todos sus habitantes los masacró, como Moisés siervo de Jehová lo había ordenado.   

 

Josué y los hijos de Israel tomaron para sí todas las riquezas materiales de los reyes y de los habitantes de todas las ciudades, pero no dejaron con vida nada que respirara.    

 

Esta orden vino de parte de Jehová a Moisés y de Moisés pasó a Josué, La orden celestial era la de destruirlos a todos sin piedad, ni misericordia alguna, por este motivo Josué destruyó también a los Anaceos de los montes de Hebrón, de Debir, de Anab, de todos los montes de Judá y de todos los montes de Israel, Josué los masacró a todos ellos y a sus ciudades destruyó.   

 

Tomó pues, Josué toda la tierra prometida por Jehová, y Josué conforme a su distribución según sus doce tribus.    

Josué 24:13 Jehová reunió a las doce tribus de Israel y les dijo: Os he dado la tierra prometida por la cual no trabajasteis, y las ciudades que ustedes no edificaron, y les dì las riquezas que ustedes no tenían, y les di también los cultivos y las viñas que ustedes no plantaron para que podáis comer.    

 

Desde esos momentos las tierras de Canaán quedaron regadas de sangre inocente, esa tierra maldita es llamada el estado de Israel, la cual espera la venida de un Mesías sanguinario igual que Moisés, Josué o David, para que culmine la gran obra de Jehová en donde primero tienen que masacrar a la mayor parte de la humanidad a lo que llaman el Apocalipsis o el fin de los tiempos que es cuando Jehová y su escuadrón de la muerte a los cuales llaman ángeles descienden sobre Sion Israel para la matanza final, quedando Israel dueño absoluto de todas las naciones.   

Ahora, pues, temed a Jehová y servidle con integridad y en verdad, y quitad de entre vosotros los dioses a los cuales sirvieron vuestros padres, al otro lado del río, y en Egipto, tan solo servid a Jehová.    

 

Después de presentadas las pruebas y las evidencias, queda muy en claro que Jehová le dio a la élite de Israel tierras ajenas, oro y plata de otros dueños, cultivos de humildes familias, les entregó ciudades ya edificadas, es por este motivo que el Sionismo judío internacional dirigido desde Israel es dueño absoluto de todas las riquezas de este mundo.   

 

El maldito Jehová de los ejércitos en toda la historia humana jamás le ha dado tan siquiera un pequeño lote en donde construir un humilde hogar a las familias más pobres y discriminadas, por el contrario, a los gobernantes que él elige para dominar a sus pueblos a su antojo y a los líderes religiosos que son sus cómplices, les da inmensas riquezas, y permite que les quitan las pocas pertenencias que tengan y los desplacen de sus propias tierras.   

 

Jehová de los ejércitos jamás ha intervenido para que se acaben las injusticias, la miseria, la esclavitud y el sufrimiento, pues es bien claro que este maldito dios crea todas estas desigualdades sociales, él tan solo es un dios que está en favor de la élite dueña de este mundo en todas sus modalidades: políticas, militares, culturales, económicas y religiosas.   

 

Jehová de los ejércitos fue quien se inventó las guerras y la violencia, la toma de ciudades y naciones a la fuerza, fue quien se inventó la esclavitud, es quien lidera la destrucción del planeta tierra, este dios maldito es adorado por judíos, católicos y protestantes quienes son sus cómplices y compinches, pero muy pronto esta raza maligna y esta entidad alienígena maldita desaparecerán para siempre de la faz de la tierra. Es por este motivo que los líderes religiosos dicen con mucho orgullo y prepotencia, traicionando al verdadero Cristo:    

 

Josué 24:16  

Entonces el pueblo de Israel respondió después de recibir la tierra prometida junto a todas sus riquezas: Nunca dejaremos a nuestro dios Jehová para servir a otros dioses.    

 

Es apenas normal que defiendan a este dios perverso, pues es él, quien les da inmensas fortunas a través de diezmos y de primicias, al verdadero Cristo no lo publicitan porque el verdadero Cristo que ofrece la salvación eterna no les da riquezas, por el contrario, dice: Dejen todas las cosas de este mundo si quieren ser salvos, o ningún rico entrará al reino eterno, o dice también: vayan y prediquen sin llevar dinero alguno.    

 

 

Revelación escrita por el espíritu de la verdad eterna Rubén Lòpez.