¿Qué cosa es la dualidad mental? 

 

Revelación escrita por el espìritu de la verdad eterna Rubèn Lòpez.

 

Soy cristiano primitivo original. Por lo tanto no soy ni católico, ni judío, ni islamista, como tampoco protestante.

 

La dualidad es la propiedad o el carácter de lo que es doble o que contiene dos naturalezas, dos sustancias o dos principios distintos.       

 

En la física, está la dualidad onda-partícula, la dualidad también se encuentra en las matemáticas, y también se encuentra en otras áreas, pero lo relevante del tema, es conocer en profundidad, que cosa es la dualidad mental y su funcionamiento en relación con el mundo que lo rodea, no estamos hablando de alto, bajo, duro o blando, me estoy refiriendo a la parte psíquica de donde surge el concepto del  bien y del mal, vamos a descubrir dónde, cómo y cuándo es que aparece esta dualidad mental en los primeros hombres.     

 

En la teología religiosa la cual habla de lo increado para referirse a dos principios supremos increados, uno del bien y otro del mal por cuya acción se explica el origen y evolución del mundo y basados en esta definición teológica se le va a revelar a la humanidad cual es el verdadero origen del mal y si en realidad fue introducido al hombre primitivo a través de una serpiente, o por el contrario, esta dualidad mental ya existía en las entidades extraterrestres a las cuales se les tiene como los creadores de la raza humana que tiempo después y a través del monoteísmo se lo atribuyen a un solo dios llamado Jehová de los ejércitos.   

   

El engaño religioso ha hecho creer que Jehová de los ejércitos es una entidad increada, y que satanás es una entidad maléfica creada por el dios increado, y dice también este engaño teológico religioso que todo lo creado por Jehová es bueno y todo lo creado por Satanás es malo, se le va a revelar a la humanidad lo que ningún ser humano conocía, pues Jehová de los ejércitos es una entidad mental que obra tanto el bien como el mal, es una entidad creada igual que lo fue el ser humano.  

 

Jehová de los ejércitos es la misma entidad llamada Satanás o el diablo y los ángeles celestiales con alas no son otra cosa que los demonios a su servicio, mientras que los hombres primitivos venían evolucionando a nivel espiritual de unidad, los llamados dioses celestiales venían evolucionando a nivel mental en el espacio exterior, esta naturaleza extraterrestre fue introducida en los episodios del Jardín del edén a Adán y Eva a lo cual la mentira religiosa llama la creación de Jehová.      

 

El bien se le relaciona a una entidad que tan solo es luz, y el mal se le relaciona a una entidad que tan solo es oscuridad, pero esto no sucede así, pues está escrito que satanás para poder engañar a las naciones se viste como un ángel de luz, de la misma forma actúa Jehová y los hombres mentales sobre la tierra y los distintos líderes religiosos que se visten como mansas ovejas no siendo otra cosa que lobos rapaces, pues con sus palabras engañan a sus creyentes haciendo parecer que son personas de luz, cuando en sus mentes a través de los pensamientos tan solo están pensando en la mentira, el engaño y la manipulación para poder amasar inmensas riquezas materiales que les trae la dualidad mental.        

Nada de lo creado por un Dios que tan solo sea luz como el descrito por Jesús puede crear algo que contenga oscuridad, pero la naturaleza de Jehová si puede crear las cosas que son de luz, como también puede crear las cosas relacionadas a satanás o al mal en general, esto significa que Jehová de los ejércitos es una entidad mental, mientras que el verdadero Dios de la luz no tiene una mente basada en un par de opuestos, por lo tanto no puede crear a un ser humano mental que pueda pensar y obrar el mal.       

 

Lean con mucha atención el relato de los episodios del Jardín del Edén, porque se va a descubrir que Jehová de los ejércitos es el mismo Satanás mental que hace el bien y hace el mal a través del sistema de conciencia mental que es su verdadera naturaleza.   

 

Génesis 1:26    

Y dijo Jehová: Hagamos al hombre nuestra imagen y a nuestra semejanza.       

 

"Hagamos al hombre", está en plural, Jehová de los ejércitos no se encontraba solo, se encontraban otras entidades mentales con él.      

 

Hagamos al hombre semejante a nosotros:     

 

¿Semejantes a que naturaleza?     

 

Pues semejantes a la naturaleza mental con o polos distintos, el positivo y el negativo, el polo del bien y el polo del mal, ahora lo van a entender mejor.       

 

"La desobediencia del hombre" El pecado original.        

 

¿Desobedecer a una orden de un superior que nos obliga a ir a matar, a violar o a robar es pecado?        

 

Eso fue lo que sucedió en el Jardín del edén, una desobediencia, el desobedecer no es pecado cuando se trata de ir en favor de la luz y del bienestar de los demás seres vivos.       

En cientos de versículos Jehová asesina o envía a matar a todos aquellos que desobedezcan sus órdenes, eso sí es pecado y del más repudiable, no solo mata a quienes no creen en él, sino que envía maldiciones por varias generaciones, y manda a estrellar a los niños contra las paredes.      

 

Este es el relato del jardín del edén, en donde Jehová de los ejércitos se delata el mismo como una entidad mental que puede obrar el bien y el mal.      

 

"En los episodios de la mal llamada Santa inquisición Católica" torturaron y asesinaron a miles de personas por el simple hecho de desobedecer las órdenes dadas por Jehová y por el Vaticano, el desobedecer a una orden relacionada a temas religiosos no debe de ser considerado un pecado, esto se llama conversión forzada en donde no existe la tolerancia religiosa de la cual tanto habla el Papa Francisco, la primera entidad que no sabe lo que significa la tolerancia religiosa es el mismo Jehová que dice muy claro: Yo maldigo a quienes no creen tan solo en mí, yo soy el único dios y no pueden adorar a otros dioses.       

 

Deuteronomio 28:15    

Yo soy Jehová su señor, si obedeces mis mandatos yo les enviaré bendiciones, pero si no me obedecen, les enviaré maldiciones.  

     

Deuteronomio 11:28    

Si no me escuchan a mí, les daré maldiciones.  

 

Quien envía maldiciones es Jehová, las maldiciones son propias de Satanás, no de un ser de luz.       

 

Levítico 26    

No hagan para ustedes otros ídolos, ni escultura, porque yo soy Jehová vuestro dios.       

 

Si me obedecen yo les daré lluvia, y la tierra dará frutos, y yo les daré muchas riquezas, pero si me desobedecen, yo haré esto con ustedes, les enviaré terror, extenuación, y calentura, haré que se les consuma sus ojos y que su alma sea atormentada, van sembrar en vano, pondré mi rostro contra vosotros, y seréis herido, vuestra tierra no dará producto, y los árboles de la tierra no darán su fruto.     

 

Si me desobedecen me pondré en contra de ustedes, y yo añadiré siete veces más plagas, enviaré contra vosotros bestias feroces que os arrebaten vuestros hijos, y destruyan vuestro ganado.     

Si me desobedecen traeré sobre vosotros espada vengadora, enviaré pestilencia entre vosotros, no les daré sustento de pan, les enviaré toda mi ira y los castigaré y matarán a sus propios hijos, y se comerán la carne de sus propias hijas.     

 

¿Será posible que exista una entidad maligna distinta de Jehová que pueda hacer estas cosas tan injustas, crueles y terribles?       

Sí existe, y se llama Satanás, Jehová de los ejércitos es el mismo diablo o satanás al cual se refería Jesús:    

  

Vosotros sois hijos de vuestro parte el diablo.      

 

En los episodios del Jardín del Edén sucede una desobediencia por parte de Eva que le es compartida a Adán, a lo cual la iglesia católica optó por llamar el pecado original que fue transmitida de generación en generación hasta nuestros tiempos, pero sucede que la desobediencia del jardín del Edén no es ningún pecado, y mucho menos una desobediencia se puede transmitir a nivel genético, la desobediencia en ningún caso puede contener una semilla llamada el mal, el diablo o satanás, por lo tanto la serpiente del Jardín del edén no es ningún diablo o Satanás, la caída del hombre no llega a través de una desobediencia, sino que el mal entra al hombre, es a través del sistema de conciencia mental que es la verdadera naturaleza de Jehová y de sus compinches genetistas que alteraron la verdadera naturaleza humana.      

 

Los profetas del antiguo testamentos hechos a imagen y semejanza de Jehová de los ejércitos, actúan de la misma forma de Jehová a nivel mental, mientras hablan de luz y amor, salen a matar, violar y robar acatando las órdenes dadas por su dios Jehová, lo mismo sucede con los tiempos actuales, los religiosos hablan de luz y amor, mientras cometen las peores injusticias y crueldades por ir tras las riquezas ofrecidas por este dios maldito que bendice tan solo a quienes creen en él.    

   

Ahora van a conocerán cientos de pruebas y evidencias que confirmarán de una vez por todas, que Jehová de los ejércitos es una entidad extraterrestre con naturaleza mental basada en un par de opuestos: Jehová como el dios de la luz, y Satanás como el dios de las tinieblas, una misma moneda con dos rostros distintos, o sea la dualidad mental.      

 

Génesis 3:1    

Pero la serpiente que era muy astuta, más que todos los animales del campo que Jehová había hecho; le dijo a Eva: ¿Conque Jehová les ha dicho: ¿No comáis de todo árbol del huerto?      

La primera parte de la narración deja muy claro que la serpiente era una serpiente de tierra, las serpientes de tierra jamás han estado relacionadas con el diablo o satanás, como sí lo es la serpiente del agua leviatán que está relacionado a las tinieblas y a los demonios.     

 

Continúa diciendo el relato del génesis 3:       

 

La mujer le respondió a la serpiente: Jehová nos dijo que podíamos comer de los árboles del huerto; pero del fruto que está en medio del huerto, no podíamos tocarlo, ni podíamos comer de él porque entonces moriríamos.       

 

¿Porque sembrar un árbol del mal? ¿Quién sembró el árbol que contenía la semilla de la caída del hombre?      

 

Por supuesto que quien sembró dicho árbol fue el mismo Jehová de los ejércitos y no la serpiente injuriada y calumniada por los distintos líderes religiosos.       

 

Génesis 3.4    

Entonces la serpiente le dijo a la mujer: No van a morir, lo que sucede es que Jehová sabe muy bien que, si comen de él, o conocen lo que oculta dicho árbol, se le van a abrir sus ojos o su entendimiento, y van a ser como dios o como el mismo Jehová, van a conocer la diferencia entre el bien y el mal.       

 

Desde el mismo momento en que la serpiente menciona la existencia de una naturaleza que contiene la semilla del bien y del mal, ya se está refiriendo al sistema de conciencia mental basado en un par de opuestos que se le había implantado a Adán y Eva, pero ellos ignoraban lo que les había sucedido, Jehová introdujo la naturaleza mental en los primeros hombres para que fuera transmitida de generación en generación a nivel genético o de memoria celular, pero en sus planes estaba el que el hombre no supiera cual era la diferencia entre el bien y el mal, si esto hubiese ocurrido así, estos serían los momentos en que la humanidad fuera toda una raza esclava de estas entidades extraterrestres, sin saber la diferencia entre el bien y el mal, tan solo Jehová y los otros genetistas, y la élite que controla a la raza humana serían los únicos que conocerían este gran secreto celestial.      

 

La serpiente lo que hace es advertir a los primeros seres humanos primitivos que venían evolucionando de manera natural y a nivel celular que acudieran a escuchar su ser interior que les iría a revelar en qué consistía el engaño de Jehová y sabrían cuál era la diferencia entre el bien y el mal, la serpiente del Jardín del edén es celular y es la verdadera vida espiritual de unidad en donde no hay opuestos, nos podemos dar cuenta que se trataba de una inspiración Divina la que estaba recibiendo Eva la mujer, porque estando ambos en el mismo lugar, tan solo Eva escuchó la advertencia hecha por la serpiente y no la escuchó Adán, no era una serpiente visible que se pudiera ver, de ahí, es que Eva le comenta a Adán sobre lo que ella había escuchado, Jehová es un mentiroso desde el principio, es el padre de la mentira, pues este les dijo que si conocían dicha sabiduría irían a morir, y no murieron, les estaba mintiendo, tan solo los estaba amenazando.     

 

Génesis 3:6    

Y vio Eva la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; entonces tomó de su fruto y descubrió su contenido, lo comió, y supo en qué consistía dicha diferencia y se lo dio de comer a su marido para que él también se diera cuenta de que en ellos había una naturaleza artificial distinta a lo que era su verdadera vida espiritual de unidad hasta esos momentos, en donde no se podía hacer ningún tipo de mal, el concepto del mal tan solo entra al hombre a través del sistema de conciencia mental basado en el par de opuestos: Positivo - negativo y luz oscuridad, este implante no lo realizó la serpiente, fue obra de los genetistas gigantes de la antigüedad a la cabeza de Jehová de los ejércitos.    

  

Es muy fácil de entender que Jehová de los ejércitos es una entidad gigante extraterrestre, de la misma raza que descendió en los tiempos de Sumeria, ya que en los relatos del antiguo testamento en donde se refieren a los gigantes Nephilin, dicen que estos gigantes hijos de Jehová se acostaron con las hijas de los hombres ya que las vieron muy hermosas, quedando muy claro que el ser humano no es hecho a imagen y semejanza de estas entidades gigantes, el ser humano es semejante a estos seres del espacio tan solo en cuanto se refiere al sistema de conciencia mental y sus opuestos.  

 

La mente es cien por ciento alienígena, es cien por ciento extraterrestre, el mensaje de la salvación transmitido por Jesús de Nazaret, el cual fue judaizado por la iglesia católica y protestante, consiste en saber en qué consistía este engaño religioso.   

¿Qué delito cometió la serpiente del jardín del edén? Por supuesto que ninguno.   

 

Jehová maldice a la serpiente espiritual que representa la unidad, como también maldice a Eva y maldice su vientre, maldice su semilla, maldice la tierra y maldice todas las generaciones que vienen hasta nuestros tiempos.      

 

Siendo un dios que tan solo es luz y que en él no hay tinieblas, ¿Porque motivo tiene el poder de maldecir no solo a la mujer, sino también a toda la tierra, y a todas las generaciones que vienen después de Eva?      

 

La maldición es algo terrible, las maldiciones tan solo pueden venir de parte de una entidad maléfica, en la naturaleza de un Dios de luz no puede existir la maldición, maldición es enfermedad, pobreza, hambrunas, guerras, y demás cosas propias del diablo, estas maldiciones se han hecho realidad en la raza humana en todos los tiempos, por lo tanto, estas cosas terribles no las ha generado la serpiente, las ha generado Jehová de los ejércitos.        

 

Siendo Jehová supuestamente un dios lleno de amor y de compasión, un dios sabio y que todo lo sabe; ¿Porque motivo permitió que se transmitiera un supuesto mal de generación en generación hasta alcanzar a más de 15 mil millones de seres humanos que han pasado sobre el planeta tierra, sufriendo la causa de las maldiciones lanzadas por Jehová?      

¿No era más fácil haber eliminado a una sola pareja y crear algo nuevo y no defectuoso y no permitir que el mal se hubiera multiplicado?       

 

Esto prueba que todo lo creado por Jehová no era bueno, ya lo había dicho antes en el diluvio: me arrepiento de haber creado al hombre y por este motivo los voy a desaparecer de la faz de la tierra, no dejaré con vida nada que respire según los episodios de la primera destrucción inmisericorde de este dios maligno, violento y vengativo en contra de la raza humana y del resto de seres vivos.       

 

Las maldiciones de Jehová de los ejércitos en el jardín del Edén.    

  

Génesis 3:14    

Jehová le dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás, pondré enemistad entre ti y la mujer, entre tu simiente, y la simiente suya.       

 

Jehová maldice toda la tierra y maldice al hombre.       

 

Génesis 3:17    

Y Jehová le dijo al hombre: Por cuanto obedeciste la voz de la mujer, y comiste del árbol que te dije que no comieras, maldita será la tierra por tu causa, y con dolor y el sudor de su frente conseguirás el pan de cada día.     

 

Génesis 3:22    

Y dijo Jehová muy enojado: He aquí que el hombre ya es como uno de nosotros, pues ya sabe la diferencia entre lo que es el bien y lo que es el mal, ahora no vaya a alargar su mano, y tome también la sabiduría de la vida y vaya a vivir para siempre.   

     

¿A qué se refiere Jehová de los ejércitos cuando dice que el hombre ya es como uno de nosotros refiriéndose a un grupo de personajes extraterrestres que se encontraban en ese momento con él?     

 

¿Para que usaban estas entidades celestiales la mente dual que obra el bien y obra el mal, si aún no existía la raza humana?     

Dice Jehová que el hombre ya es como uno de ellos, o sea seres mentales que saben obrar el bien y el mal, esto significa que todo lo relacionado con el mal y la oscuridad fue traída o introducida al hombre por entidades extraterrestres, y que el sistema de conciencia mental basado en un par de opuestos, no es la verdadera naturaleza del hombre que es la que lo conduce de nuevo a su verdadero origen que es la eternidad.        

 

Esto se puede probar también, pues el mismo Jehová dice, que no vaya a ser que el hombre conozca la sabiduría del árbol de la vida y viva para siempre, o sea que cierra toda posibilidad para que el hombre descubra cuál es su verdadera naturaleza y viva para siempre en la eternidad, pero Jesús trae la buena nueva, pues dice su mensaje de salvación, que quienes logren vencer todas las cosas que ofrece este mundo mental creado por Jehová, tendrán derecho al árbol de la vida y vivirán en lo que es eterno.    

    

Jehová y su corte celestial son entidades extraterrestres gigantes con alas que tienen sentimientos, emociones y pasiones iguales a los de los seres humanos sobre la tierra, tienen rostro, boca, ojos, pies y manos y pueden hacer tanto bien como también el mal, esta naturaleza dual mental le fue introducida al hombre mediante una alteración genética en los episodios del Jardín del Edén, el hombre primitivo antes de estos episodios venía evolucionando de manera espiritual celular de manera natural.